¿Cómo liberarte de la ANSIEDAD?
La ansiedad y la preocupación pueden dominar tu vida si lo permites. Ya nos guste o no, el estrés constante y la preocupación pueden enfermarnos físicamente. La buena noticia es que hay formas de ayudar a aliviar la ansiedad.
El primer paso es descubrir exactamente de qué estás preocupado. ¿Es algo que puedes cambiar? ¿Es algo sobre lo que no tienes control? Al determinar la raíz de tu ansiedad, puedes entender mejor cómo superarla.
Por ejemplo, si te sientes ansioso por perder tu trabajo, tienes la capacidad de cambiar esta preocupación. Puedes trabajar más duro para demostrar que eres una parte indispensable del equipo o puedes comenzar a buscar un nuevo trabajo. Tomar acción es la manera más segura de derrotar la ansiedad.
La verdad es que hay muchas situaciones en tu vida que puedes cambiar con algo de esfuerzo. Por ejemplo, si te preocupa tu peso, ¡la buena noticia es que puedes cambiarlo! Ya sabes que se necesita una dieta saludable junto con ejercicio regular. Poco a poco, tu peso se derretirá y tu salud mejorará.
Al determinar la raíz de tus ansiedades y desarrollar formas de convertirlas en algo positivo, a menudo puedes superarlas.
Aquí tienes algunos consejos y técnicas para ayudarte a manejar tu ansiedad:
- Conoce tus ansiedades. Anota exactamente qué está causando tu ansiedad, luego apunta formas en las que puedes cambiar el resultado. Saber contra qué estás luchando es la clave para sentirte mejor contigo mismo y tu situación actual.
- Respira. Una vez que hayas identificado las cosas que necesitas cambiar, siéntate y respira. Esta forma de relajación puede ayudarte a calmar tu corazón acelerado y darte paz mental.
– La respiración rápida por la ansiedad puede llevar a un ataque de pánico. No permitas que llegue tan lejos. Respira profundamente y lentamente tan pronto como te sientas preocupado o ansioso.
- Visualiza. Quizás una de las formas más efectivas de superar la ansiedad sea la técnica de visualización. Elige un espacio tranquilo en tu hogar, enciende algunas velas y cierra los ojos.
– Imagínate en tu situación ideal. Siente la calma y visualiza cómo te liberas de tus preocupaciones. Piensa en lo feliz que serás una vez que tu fuente de estrés se haya reducido. La visualización positiva puede ayudarte a avanzar hacia la visión más feliz que has creado en tu mente.
- Usa afirmaciones positivas. Cuando las cosas se ponen difíciles y sientes que estás perdiendo el control, repite una afirmación positiva una y otra vez en tu cabeza. Por ejemplo, si necesitas un trabajo, puedes repetir algo como: «¡Soy una persona valiosa y trabajadora que merece una nueva oportunidad gratificante!»
– Reafirmar pensamientos positivos repetidamente puede ayudarte a creer que todo es posible. El poder de la mente es infinito.
- Dieta y ejercicio. Comer una dieta equilibrada y hacer ejercicio puede ayudarte físicamente a manejar el estrés y la ansiedad. Cuanto más fuerte esté el cuerpo, más fuerte estará la mente. Es un hecho: si maltratas tu cuerpo con comida chatarra o drogas y alcohol, tu cuerpo y mente reaccionarán de manera negativa.
– Cuida bien tu cuerpo y te ayudará a cuidar tus preocupaciones.
- Busca apoyo. Habla con alguien que haya estado en la misma situación. Comunicarte con amigos y familiares o buscar ayuda profesional puede hacer maravillas para ayudarte a deshacerte de tu ansiedad.
– Una vez que ves que alguien más ha pasado por lo que estás experimentando y lo ha superado, te da una gran esperanza de que tú también puedas hacer lo mismo.
Las ansiedades son parte de la vida cotidiana. Cómo elijas manejarlas es lo que marca la diferencia. Deja de dejar que la ansiedad te controle. Toma las riendas y hazle saber a la ansiedad y a las preocupaciones que tú eres quien está al mando de tu vida.