Ansiedad y el alcohol
Cómo me siento después de unos tragos
Introducción
El sábado de la semana pasada tuve un almuerzo con amigos en el que tomé algunas cervezas. Desde el domingo, me siento mal tanto física como emocionalmente. Hace mucho no me sucedía esto, y es importante para mí ponerlo por escrito para encontrar calma y compartir mi experiencia con quienes quieren aprender sobre esto y entiendan la relación entre la ansiedad y el alcohol.
Tragos en reuniones sociales
Cuando tengo reuniones sociales, tomo cerveza. No ocurre todas las semanas, pero cuando se da, elijo la cerveza porque la prefiero por encima de otros tragos. Sin embargo, el malestar aparece dos o tres días después. Me siento triste, arrepentido de acciones que tomé e incómodo emocionalmente. Es muy parecido a como cuando recién empezaba con la ansiedad generalizada y ataques de pánico. Es la misma incomodidad en el centro del pecho, angustia y preocupación sin una razón aparente.
Los días posteriores
Dos o tres días después de consumir alcohol empieza el malestar físico y emocional. Primero, me siento triste, desanimado y angustiado. Estoy menos tolerante de lo que ya soy. Sé que la ansiedad y el alcohol son muy malos compañeros y que días después vendrán a recordarme lo que parece que olvido cuando estoy tranquilo y pasando un buen rato. La ansiedad aumenta, pero con la medicación que tengo, no permito que escale a mayores ni que provoque un ataque de pánico.
A pesar de tomar la medicación, el malestar no se va del todo ni con facilidad. Así que tengo que tomar más pastillas, siempre la cantidad que el médico me ha recomendado, en el transcurso del día para no permitir sentirme peor. Tengo mucho más sueño de lo normal porque sentirse ansioso consume mucha energía y además la medicación contribuye a la sensación de somnolencia.
La ansiedad se manifiesta de manera constante por más que tome la medicación, aunque esta ayuda a mantenerla controlada. En cuanto a la intensidad, es moderada, pero está presente por lo menos por dos días. Investigando un poco sobre el tema, he aprendido que el alcohol interfiere con un neurotransmisor llamado ácido gamma-aminobutírico (GABA, por sus siglas en inglés), que es clave en la regulación del sueño, la relajación y la calma del sistema nervioso central.
Por otro lado, a medida que el alcohol aumenta las acciones del GABA, la cantidad de este neurotransmisor que el cuerpo produce de forma natural empieza a disminuir. Así, si el alcohol se elimina del cuerpo antes de que el GABA vuelva a su nivel normal, nos quedamos con la ansiedad que teníamos antes e inclusive puede ser más fuerte. El alcohol limita y disminuye las sustancias químicas que produce el cerebro de manera natural, que nos permiten estar calmados y que promueven el bienestar.
Manejo de los síntomas
Tengo dos estrategias desde hace mucho para aplicar en estos momentos y una tercera que he aprendido recientemente. Las conocidas son, primero, la medicación y, segundo, decirme a mí mismo qué es lo que está pasando con mis pensamientos y emociones. Lo identifico para que mi mente tenga la explicación necesaria para controlar los síntomas físicos y emocionales por la mezcla de ansiedad y el alcohol. La tercera, que aprendí hace poco cuando empecé a escribir este blog, es que compartir lo que siento, ya sea con alguien de confianza o escribiendo, me ayuda a encontrar la calma que la medicación no te puede dar por sí sola.
Utilizo las dos primeras siempre, aunque no tienen la suficiente fuerza como cuando me siento ansioso en la semana. Por lo tanto, es necesario a veces tomar más medicación y darle tiempo al cerebro y al cuerpo para reestablecer su ritmo normal. Lamentablemente, yo no he encontrado la manera de controlar de manera inmediata lo que el alcohol produce en mí hasta cuatro días después de la “fiesta”.
Reflexiones y consejos
La paso muy mal en los días posteriores. Entre tristeza, angustia y arrepentimiento, las horas se me pasan sin encontrar un escape rápido. Por la tristeza y angustia, puedo estar poco conectado con mi familia, hablar poco, estar desanimado para cualquier plan con ellos y también impacta muy fuerte en mi nivel de tolerancia. No necesariamente la falta de tolerancia significa que me pongo de mal humor, también significa que no tengo fuerza para enfrentar un momento de tensión en casa y quiero huir del problema saliendo de la casa o sumergiéndome aún más en la sensación de tristeza y falta de control emocional.
He aprendido que hay un impacto fuertísimo en mi estado emocional y mental luego de consumir alcohol. Es posible llevar una vida normal y tranquila, tomando algunos tragos, pero sin llegar a excesos que luego producen un malestar que sólo los ansiosos pueden comprender.
Mi consejo para otros que puedan estar en una situación similar, donde se encuentran la ansiedad y el alcohol, es que cualquier evento social o de celebración lo experimenten con moderación. La peor resaca que deja el trago, para una persona ansiosa, no es el dolor de cabeza y de barriga, es el desorden emocional y del sistema nervioso que no se supera hasta algunos días después de haber disfrutado de una tarde o noche divertida con tragos.
Conclusión
Compartir lo que siento me libera. Me ayuda a darle una explicación real a lo que pienso y siento y con ello encuentro parte de la calma. Sin duda, la tengo que complementar con medicación porque de lo contrario se me hace imposible volver a la normalidad.
Espero que mi historia y mi experiencia permitan a quien lea estas líneas entender lo que siente luego de una juerga y que contribuya a que manejen con calma y moderación cada evento social al que asistan.
Es posible divertirse y tomar unos tragos sin pasar por momentos de angustia y ansiedad en los días posteriores, pero es importante saber controlar el ritmo al que uno quiere disfrutar de cada momento, teniendo siempre presente que la relación entre ansiedad y el alcohol trae consecuencias para nosotros.
Información complementaria:
Para mayor información sobre la relación entre la ansiedad y el consumo de alcohol, te invito a visitar los siguientes enlaces en los que yo he investigado sobre el tema: