Oración y meditación para calmar la ANSIEDAD
Si te sientes ansioso de vez en cuando, eso es completamente normal. Cuando la ansiedad se vuelve abrumadora, puedes sentir la tentación de buscar consuelo en medicamentos recetados, alcohol o drogas. Estos métodos, sin embargo, traen consigo sus propios problemas.
La buena noticia es que puedes superar los momentos de ansiedad por tu cuenta sin necesidad de drogas que alteren tu mente. Tus preocupaciones pueden transformarse en paz con estrategias simples y naturales. Una de estas técnicas es el uso de la oración y la meditación.
¿Qué es Mejor? ¿la Oración o la Meditación?
La respuesta es simple: Usa la que prefieras. Algunas personas tienen una relación cercana con un poder superior mientras que otras no. No importa cuál sea tu creencia religiosa, puedes conquistar tu ansiedad a través de tus pensamientos y afirmaciones – ¡sin necesidad de medicación!
Si te gusta orar, eso es genial. Si prefieres meditar, entonces hazlo. Cualquiera de las dos técnicas que te haga sentir más cómodo es aceptable. Esto se trata de que tú mejores, y tú sabes mejor qué te hará sentir a gusto.
Cómo Comenzar
Puedes empezar tu camino hacia una vida libre de ansiedad de inmediato y todo comienza con una respiración profunda. Lleva el aire profundamente hasta tu diafragma y exhálalo lentamente. Haz esto varias veces y comenzarás a sentirte más tranquilo.
¿Estás respirando de manera efectiva? Cuando tomas aire, si solo la parte superior de tus pulmones se expande, tu pecho sube y baja. Cuando respiras de la manera correcta – la manera calmante – tu abdomen sube y baja, no tu pecho superior, porque tus pulmones enteros se están llenando de aire fresco.
Evita respirar solo desde tu pecho superior y ya estarás en el camino hacia sentirte más tranquilo y menos ansioso. Es algo simple de hacer y una gran manera de empezar. Cuanto más lo hagas, más se convertirá en algo automático. Pronto, te sentirás más tranquilo sin siquiera pensar en tu respiración.
Aquí tienes algunos otros consejos para ayudarte a sentirte calmado mientras oras o meditas:
- Usa tu respiración como un mantra. Inhala mientras te das pensamientos y sentimientos positivos. Exhala cualquier cosa negativa que estés pensando o sintiendo. La respiración es el ritmo de la vida. Úsala a tu favor.
- Ora o medita a la misma hora cada día. Dedica unos minutos – no tiene que ser mucho tiempo – a la reflexión tranquila. Di cosas buenas a ti mismo. Puedes enfocarte en tu salud, finanzas, familia o cualquier cosa que quieras fortalecer. Evita los pensamientos negativos durante este tiempo.
- Ríe. Intenta decir «Jo, Jo, Jo, Je, Je, Je, Ja, Ja, Ja» y otras frases tontas en voz alta. Cuando lo hagas, empezarás a sonreír, luego a reír de verdad. ¡Y cuando te ríes, no puedes fruncir el ceño ni sentirte ansioso!
- Ora o medita con otros. Únete a una iglesia, haz yoga o encuentra un grupo de apoyo para la ansiedad. Muchos otros comparten tu lucha, y puedes sentirte mejor contigo mismo y más en sintonía con los demás cuando compartes tus sentimientos.
Próximos Pasos
Cuando inicies tu camino hacia la paz personal a través de la oración o la meditación, espera conquistar tu ansiedad. Sin embargo, evita la trampa de asumir que lo harás en un día, o incluso en una semana. Tomó tiempo llegar a dónde estás, y tomará tiempo regresar a donde quieres estar.
Lo importante es dar ese primer paso y luego disfrutar y apreciar el viaje.
Cada viaje comienza con ese primer paso, y una vez que lo des, estarás bien encaminado. Respira. Ríe. Medita o reza. Encuentra tiempo para pensar y relacionarte con los demás, en lugar de concentrarte en tus preocupaciones.
Cuando hagas estas cosas, te sentirás más tranquilo y enfocado. Lo más importante, volverás a ser feliz, y no hay mayor regalo que puedas darte a ti mismo que la alegría.